martes, 9 de diciembre de 2008

A MI HIJA ROMINA



Llegaste casi a la media noche
Un veintiuno de noviembre
Alumbrando como una estrellita
El amor que estaba en mi corazón

Eras esa luz del cielo que Dios
Premiando mi vida en mi manos
Tu cuerpito dejaba como una flor

Eras mi sueño hecho realidad
Otra vez mis manos acariciaban
Un jazmín que llegaba a mi vida
Para aromatizar mi sentir

Recuerdo cuando eras un bebe
Y en mis brazos te cantaba
Una canción de cuna...
Donde tus ojitos se cerraban

Y fuiste creciendo y vi como esa
Bebita, en nena te ibas convirtiendo
Hubiera querido detener esos días
Porque muy rápido crecías

El tiempo pasaba y otra vez me ganaba
Ahora ya eras toda una señorita
Que soñaba con la magia de los duendes
Y el encanto de las hadas.

Y llego quien seria también para mí
Otro hijo, el hombre que Dios puso
En tu camino para que en su vida
Te lleve como la estrella de su destino

Hoy que estás construyendo tu nido
El tiempo otra vez me esta ganando
Tu estancia en mi casa se va terminando
Porque esta vez en brazos te va llevando

Pero al cielo y al tiempo les doy las gracias
Porque han dejado que tú sembraras mi vida
Con ese amor que llevo y llevare en mi alma

ROMINA

En estos versos sencillos te dejo reflejado mi amor
Para que siempre tu recuerdes que aun sin verme
Yo seguiré presente en el latido de tu corazón

TE AMA PAPA