jueves, 23 de octubre de 2008

NOSTALGIAS





Soy del tiempo de los zaguanes, esos pasillos que vinculaban dos o tres hogares de gente trabajadora.
Donde en ellos se vivían los romances, que aromatizados por los malvones en flor, era la cuna donde los sueños, se perdían en la melodías de un suspiro.
Del tiempo en que por la calle pasaba el mimbrero vendiendo sillas y el lechero que con sus tarros llamaba de puerta en puerta.
De los mercados de Abasto y Spinetto donde los inmigrantes de países europeos trabajando de sol a sol, descargaban cajones de frutas y verduras.
De esos bailes donde las minas eran las pinturas del mejor cuadro de Dalí, donde el misterio y la elegancia compartían la sonrisa con el brillo del carmín.
Del tiempo en que vivía Chichilo un pizzero que vendía sobre un caballete sus porciones de pizza cancha.
De los viajes en Mateo que contratábamos con los muchachos para ir cantando en carnaval.
De esos picados de barrio que jugábamos al fútbol con la ilusión de encarnar en nuestras piernas a los jugadores que jugaban en primera división.
De ese tiempo que tomado de la mano de mi primera novia, caminaba por las calles hablándole de amor.
Del tiempo en que mis viejos vivían y soñaban que en la vida yo tuviera lo mejor con la honestidad que todo hombre tiene que tener.
Que épocas, que recuerdos llenos de nostalgia acarician mi alma en este atardecer.

Eduardo Nieto Mùjica